"Primero padre, después campeón"Una mirada diferente sobre Narváez, el actual campeón mundial súper mosca OMBPor Carlos Irusta ESPN.com BUENOS AIRES -- Atrás quedó la pelea del sábado 21 de diciembre. En Benavidez, provincia de Buenos Aires, Omar Narváez (38) defendió con éxito y por novena vez, su corona súper mosca de la OMB. Venció por KOT en 7 asaltos al retador mexicano David Carmona (22), campeón mundial juvenil de la OMB. Ramón Cairo para ESPN.com
La pelea fue detenida por el técnico del retador, el ex campeón mundial José Luis Bueno: buena decisión, jugando con las palabras, porque Carmona, quien había sufrido una caída en el sexto, estaba empezando a ser sometido a una paliza.
Narváez suma ahora 41 victorias (22 nocauts), 1 derrota y dos empates, y realizó así su pelea número 28 por campeonato mundial, que incluye 16 defensas de la corona OMB de los moscas, lograda en julio de 2002. Pero hay otra cara del campeón...
"Este ha sido un gran año para mí en todo sentido, ante todo como padre. Es que para mí, por sobre todo está la familia y segundo, la parte boxística y el trabajo. Primero soy padre, segundo boxeador y luego hago clínicas y exhibiciones. Gracias a Dios, mantengo la cabecita muy ocupada. El problema del boxeador es que, a veces y entre pelea y pelea tiene mucho tiempo libre, y el exceso de tiempo libre no es buen compañero..."
Hay mucho énfasis en sus palabras sobre tu condición de padre. Sí, es lo primordial. Primero, soy padre porque mis dos hijos duermen todos los días conmigo. Aunque estoy separado hace más de 7 años, tengo una buena relación con mi ex mujer. Así que duermo con ellos todas las noches, desayuno con ellos... A las 13 llevo al colegio a mi hija Sharon Beatriz, de 14 años y luego, a las 13,30 al Junior Omar, de 8. Así que, mientras ellos están en la escuela, yo voy haciendo mis entrenamientos, amoldándome a los horarios de ellos. Trabajo como se dice en la parte del boxeo, la madre los busca a las 5 y media, 6 de la tarde, y luego vuelven a mi casa, así que prácticamente están todo el día conmigo.
No debe ser fácil congeniar esos horarios con los del boxeador. No es tan así, y explico por qué... Primero; ser padre me ayuda y me mantiene con ansias y hambre y ganas de hacer cosas. Me gusta entrenar a pesar de los 38, y son mis hijos los que más me ayudan y me motivan para sentirme mejor. Ellos, hasta los fines de semana prefieren quedarse conmigo. Al Júnior porque le gusta ir a la playa, salir en el auto o jugar a la pelota. Y, en el caso de mi hija, también disfruta mucho estando conmigo. Yo viví cinco años en Buenos Aires y unos cuatro en Córdoba. En esas ciudades grandes, especialmente Buenos Aires, los tiempos son complicados para trasladarse, tarda uno como una hora en llegar a cualquier lado, porque las distancias son muy grandes. Ahora, en Trelew, es distinto; vivimos a 8 cuadras.
Tenés una hija que está por cumplir los 15... ¿Compraste la escopeta, como suele decirse? Es que con el nombre que tengo, ¡los candidatos saben que tengo un arma en cada mano, ja! Es una broma, claro.... Esto es una intimidad, pero con la madre, la defiendo a mi hija, porque ella no entiende que Sharon quiera ir a matinés, o ir a bailar, o que ya empiezan a hablar de chicos... Estamos en el 2013: cuando yo era chico jugaba a la mancha y ahora vienen "chipeados" como digo yo, todo es mucho más temprano, más rápido y hay que estar acorde con los tiempos...
De hecho, te manejás bien con las redes sociales. Trato de manejarme lo mejor posible con la tecnología... Trato de estar con lo que está de moda, trato de ponerme ropa moderna. Al hacer deporte y estar en la calle he aprendido mucho, pero ante todo, hay que tener la mente abierta. Yo no aprendí solamente a ser boxeador. Y a mis hijos trato de mostrarles lo bueno, lo malo, todo... Creo que el ejemplo de las cosas buenas es el padre y tienen en mí un gran espejo para respetar o admirar. No pretendo que sean campeones mundiales. Con que mis hijos sean deportistas sanos y educados me sobra. Trato de inculcarles las cosas: creo que con las verdad y siendo buena persona, se llega muy lejos.
Decía Juan Carlos Reveco que, hoy, hay boxeadores que saben más que sus técnicos. ¿Es así? Yo sentí que me pasó algo parecido a mí también. Cuando yo salí del Seleccionado llevaba mucho tiempo trabajando con un gran entrenador como es el cubano Sarbelio Fuentes. Y entonces, pasé a entrenar con otro gran técnico que fue Carlos Tello. Pero... lo que me aportaba, era repetirme lo mismo que había aprendido durante 5 años con Sarbelio. Entonces, yo discutía pero bien, algunas cosas con Tello, aportando mis propias ideas, expresando todo lo que yo ya había aprendido.... Hasta que decidí que era capaz de estar solo y manejarme solo.
O sea que hoy entrenás solo... Estoy rodeado de mis hermanos, que no son grandes profesores, esa es la verdad. Ellos debutaron como técnicos acompañando al hermano que pelea por el campeonato mundial. A veces llego al rincón y vemos las cosas diferentes...
(Los hermanos de Omar Narváez son Marcelo, más conocido como "El Facha", Jorge, Mario y Daniel, quien peleó por el campeonato mundial y está casado con Soledad Matthysse hermana de Lucas y flamante campeona del mundo-, o sea que todo queda en familia, absolutamente)
Pero... ¿Cómo se puede uno entrenar solo? Porque, ante todo, me sentía y me siento, claro- totalmente responsable para hacer lo que tengo que hacer. Nadie me pone horarios, ni me dice cuántos rounds tengo que hacer. Cargar la mochila del campeón me enseña a regularme y tener una gran disciplina. Yo regulo todo en la cabeza y se muy bien cómo me voy sintiendo. Aprendí así.
Lo mismo me pasa arriba del ring. No sé cómo voy a pelear mañana, pero depende de lo que haga el rival, iré leyendo la pelea round a round para no dejarme pegar. Se cuándo tengo que ir para adelante, para atrás o a los costados. Aprendí de esa manera y es lo que hago. Mi preparador físico, Ruperto Ruiz es al único que respeto y obedezco, porque él me hace un plan de entrenamiento de acá a dos meses, de acá a tres meses... y yo, por más cansado que esté, si él me dice "hay que hacer esta fuerza o este trabajo", lo cumplo siempre.
Pero en la parte boxística, regulo mi cuerpo de acuerdo como lo siento. A veces hago la misma cantidad de rounds de otros días pero le pongo una intensidad menor. Otras veces, en cambio, trabajo a full cuando estoy con todas las pilas, como digo yo... Y si falto una tarde, lo compenso con un sábado o un domingo. En resumen, no me hago trampas.
¿Y sentís la tentación de decir: "Hoy no tengo ganas, no voy a correr"? Siempre tengo la tentación. Muchas veces no voy a correr a la mañana porque dormí poco, pero prefiero entrenar con ganas a la tarde: a los 38 no voy al gimnasio a perder tiempo. No voy a mirarme al espejo. Si voy, voy a trabajar. He trabajado a las 12 de la noche, esa es la ventaja de tener mi gimnasio propio.
¿Cómo es el tema de tu gimnasio? La idea de tener un gimnasio propio fue, ante todo, de sentirme cómodo, de tener todos los elementos y espacios disponibles para mi. Y no encontrarme con un horario. Es que mis hermanos, a veces, también ellos tienen que cambiarlos, porque también son padres de familia. Entonces es mutuo y nos vamos acomodando.
Bueno: a raíz de eso, es que tengo un gimnasio abierto para el público, que lleva mi nombre. Los chicos que quieren boxear, no pagan un centavo y están a cargo de mis hermanos. Yo superviso y nada más. Al tener la escuela mía, lo que aplican mis hermanos alcanza y sobra, porque ellos también boxeadores. Hilando muy fino, cuando hay que hacer un comentario o una corrección, agrego un granito de arena. Entreno cuando me siento o modo y ellos están. Pero no entreno a nadie, ellos se encargan de hacerlo.
¿Reflexiones sobre Lucas Matthysse tras su derrota con Danny García? En el boxeo no está nada dicho, para mí lo de Lucas -que es un gran amigo, pero para analizar estas cosas me saco el compañerismo, solamente hablo como boxeador-, la pelea cambió mucho luego de la lesión del ojo que sufrió Lucas. García creció mucho, pero, así y todo lastimado, lo respetó mucho a Matthysse.
Tal vez alguno se enoje con lo que voy a decir, pero yo digo las cosas con la verdad y porque creo saber de lo que hablo, pero... Lucas sabe más que su rincón, dicho con todo respeto para la gente que trabaja con él. Muchas veces, a mí me hicieron un plan para atacarme o defenderme y yo terminé haciendo otra cosa. Al boxeador lo pueden preparar los mejores entrenadores del mundo, pero eso no significa que va a ser campeón mundial.
Es el boxeador el que resuelve las cosas. Lucas dio todo lo que tenía que dar. Si a Lucas le dicen "hacé esto", no lo va a hacer porque el que recibe los golpes es el... Creo que cambió mucho la pelea con el tema del ojo. García lo salió a respetar de entrada y Lucas buscó la pelea toda la noche: que hubiese pasado sin la lesión en el ojo, no lo sé...
¿Y en cuanto a Marcos Maidana y su victoria sobre Adrien Broner? Yo le tenía mucha fe, porque pega fortísimo. Al Chino hay que respetarlo, siempre, en todo momento. Broner entrena con uno de los mejores equipos del boxeo mundial, pero todavía no sé por qué no lo mandaron a moverse. Si se quedó parado o quiso fanfarronear, es problema de él, pero si yo soy Broner no saldría nunca a fanfarronear sin saber si el rival pega o no, por ejemplo. En el boxeo nada está dicho, por más que tengamos uno de los mejores equipos, el que resuelve es el boxeador.
¿Y ahora? David Carmona y 2013 ya quedaron atrás... A los 38 tengo mucho para dar: me bajo contento del ring y creo que terminé el año de la mejor manera. Hoy se habla de Matthyse, Maidana, Reveco, Narváez y Maravilla y por eso de todo el boxeo argentino, lo mismo que las chicas campeonas mundiales. Estoy muy contento porque este año el boxeo logró, gracias a Marcos Maidana, un Olimpia de oro.
¿Yo? Seguiré con lo mío, entrenando y peleando. Sigo con las mismas ganas de siempre, con el mismo respeto por todos los rivales y con el mismo sacrificio o más todavía. Es que, gracias a mis hijos y mi familia, todavía tengo hambre de mayores conquistas. Gracias a mis hijos...
Carlos Irusta Carlos Irusta es uno de los periodistas de boxeo más reconocidos de la Argentina. Actualmente, conduce en radio el programa Ring Side en el Aire los domingos por la noche en AM 910, La Red, y en TV es una de las voces de Noche de Combates por ESPN. Además dirige la revista Ring Side. Fue prosecretario de redacción de la revista El Gráfico. Para seguirlo en Twitter: @carlosirusta Consulta su archivo de columnas. Fuente: espndeportes.espn.go.com/news/story |